Una vez has experimentado que los efectos son reales, el siguiente paso es consolidarlos.
Para obtener unos efectos duraderos, recomendamos seguir consumiendo la píldora de manera continúa (diaria, cada tres días… según tu necesidad)
Esto facilita y consolida el efecto de la pastilla, ya que nuestra mente reconocerá y reproducirá esa sensación en el momento en que la «ingiera». De la misma manera que ver la imagen de un limón genera salivación ya que nuestro cerebro tiene aprendido que es ácido.
Sabemos que los efectos se incrementan según se incrementa el valor del placebo. Por ello tenemos un gotero virtual que intensificará el efecto. Consúltanos tus dudas.
Cuándo parar lo decides tú, según vayas sintiendo que el problema desaparece. Siempre podrás retomarlo cuando lo necesites. Como cualquier placebo, puedes tomarlo indefinidamente si eso ayuda a conseguir los resultados que buscas.